API Rest y Web Service: Diferencias entre API y Servicio Web 2024

Si quieres saber que diferencias existen entre una API y un servicio web, en este artículo te lo mostramos. Antes de empezar deberías de saber que todos los servicios web son API, algo que no sucede al revés. Esto quiere decir que no todas las API son servicios web. Precisamente por este motivo es necesaria la diferenciación por que todavía son muchos los usuarios que las confunden.

Las API son un buen ejemplo de como han evolucionado los servicios web. Esto se debe a que ambos siguen facilitando la transferencia de información. A diferencia de los servicios web las API son mucho más dinámicas.

¿Qué es un servicio web?

Ya que hemos mencionado que todos los servicios web son API y que estas son una evolución de estos servicios, empezaremos conociendo mejor lo que es un servicio web.

Un servicio web es cualquier pieza de software que se ofrece a través del uso de internet y que cuenta con una comunicación estandarizada a través de la codificación XML. Un cliente utiliza un servicio web cuando lleva a cabo una solicitud, habitualmente como un mensaje XML y el servicio web le responde en XML. Esta comunicación se lleva a cabo a través de una red, siendo el HTTP el medio de conectividad más común que utilizan los dos sistemas.

Muchos usuarios entienden estos servicios web como un sinónimo de SOA, la Arquitectura Orientada a Servicios. Esta arquitectura se basa en sus estándares, tales como XML-RPC y SOAP. Uno de los principales aspectos de estos servicios web y que más se critica es el grado en el que el cliente y el servidor se acoplan. Se crea un problema cuando el cliente lleva a cabo una llamada de forma remota a un procedimiento RPC dentro de un sistema distante.

Servicios web basados en rest

Teniendo en cuenta esto, cabe preguntarse por qué una API no es un servicio web y aquellos aspectos que explican los motivos por los cuales va más allá.

Una API normal y corriente tendrá especificado como los componentes de software deben de actuar cuando utilizan el protocolo web HTTP a modo de intermediario. De esta forma, esto resulta mucho más cómodo y práctico para el cliente, ya que este no tiene la necesidad de saber a que procedimientos llama dentro del servidor.

A diferencia de un servicio web, la API utiliza diferentes comandos denominados "verbos" que se integran dentro del propio HTTP. Cuando se llega al otro extremo, el verbo HTTP utilizado para recuperar los datos es "Get". Cuando se lleva a cabo para abstraer los sistemas entre sí, la cosa cambia y aquí se considera que estos sistemas se acoplan de forma mucho más flexible. Esto se nota mucho más si lo comparamos directamente con lo que son los servicios web. El sistema se considera mucho menos quebradizo y algo más estable.

Esta flexibilidad es una de las ventajas con las que cuentan las API y que demuestran la evolución que existe más allá de los propios servicios web. Los sistemas, el cliente y el servidor no dependen el uno sobre el otro y pueden utilizar diferentes tipos de lenguajes para su implementación sin ningún tipo de problema. Esto implica que las API no se encuentren tan limitadas como un servicio web, ofreciendo muchas más posibilidades en su desarrollo.

Aspectos en común entre las API y los servicios web

Una APi es una evolución del servicio web. Como tal, esta tiene sus orígenes en estos propios servicios y, por supuesto, cuenta con una serie de características similares que así lo indican.

Ambos, las API y los servicios web son medios de comunicación entre un consumidor y un proveedor. Además, ambos cuentan con cargas de datos basadas en XML, aunque el JSON es el tipo de carga más habitual en las API por lo útil que resulta. Cuando comparamos un servicio web con una API la principal diferencia radica en el trabajo de los consumidores y proveedores a la hora de empaquetar y desempaquetar los datos.

Este proceso se conoce como serialización y deserialización. La evolución de la API se muestra al ofrecer un trabajo mucho menos costoso para el consumidor. Además de resultar más cómodo, ofrecen un mejor rendimiento ya que las API llevan a cabo menos cálculos. Por este motivo, las API son excelentes para poder transferir datos en dispositivos más pequeños como los teléfonos móviles.

Por el contrario, un servicio web facilita la interacción entre dos sistemas. Estos habitualmente dependen de una interfaz parecida a RPC de XML para poder comunicarse entre sí. SOAP define el intercambio que se basa en XML y este se encuentra mucho más vinculado a la arquitectura del cliente/servidor.

Por todo esto, API y servicios web tienen en común que son un medio que busca un mismo fin, la comunicación. Ambos se pueden configurar a través de una red o, si se prefiere, dentro de una propia máquina. Sin embargo, dependiendo de como se haya enfocado cada uno este cuenta con sus propias ventajas e inconvenientes.

A día de hoy los servicios web se utilizan para la comunicación de un dispositivo a otro. Esta comunicación a través de internet se optimiza de máquina a máquina, por lo que los archivos que lee la máquina como XML se pueden transferir con facilidad. Sin embargo, una API cuenta con una interfaz de software a software.

Estos cuentan con un conjunto abstracto de diferentes instrucciones, los verbos que hemos visto, para tratar de acceder a las diferentes aplicaciones que se basan en web. Básicamente, cualquier aspecto que podamos lograr con una API lo vamos a poder lograr en un servicio web sin problema. La esencia de todo esto sería que los servicios web son los predecesores en esta materia aunque ahora se muestren como algo más arcaico.